Azahara Muñoz, actual defensora del título del Lacoste Ladies Open de France, continúa con su buena actuación en el bonito y estrecho recorrido de Golf de Chantaco. Al término de la tercera jornada, la malagueña es tercera empatada con la escocesa Pamela Pretswell, ambas con -7 a cuatro golpes del dúo de líderes.
Azahara, pese a empezar su vuelta con bogey en el hoyo 1, ha cuajado su mejor actuación de la semana merced a cinco birdies sin ningún otro error. La malagueña mantiene con ese parcial de -4 plenas opciones de revalidar el título en la que sería su tercera victoria consecutiva en la cita francesa, pero dichas posibilidades pasan por un resultado realmente bajo o por que los nervios atenacen a las componentes del partido estelar en la jornada definitiva.
«Estoy obviamente más lejos de lo que me hubiera gustado, pero me lo quedo», declaró Azahara.«A mitad de vuelta estaba seis o siete golpes atrás así que si mañana estoy a cinco golpes todo es posible. Aquí puedes conseguir un resultado realmente bajo, y espero ser yo la que lo consiga mañana con un poco de suerte. Puedes anotar tanto un resultado muy abultado como un montón de birdies, puede ir en cualquiera de los dos sentidos. Me dije a mí misma que fuera paciente, que me quedaban muchos hoyos y que siguiera haciendo lo que estaba haciendo».
Carlota Ciganda, la otra española que consiguió superar el corte, ha vuelto a repetir el mismo resultado de jueves y viernes, un 70 (par del campo) que la sitúa empatada en la vigésimo quinta posición. La brava jugadora navarra ha vuelto a pagar su excesivo número de errores, tres bogeys y un doble bogey que hacen casi imposible avanzar en la clasificación pese a los magníficos cinco birdies anotados.
Recordemos que desgraciadamente la tercera española inscrita en el torneo, Patricia Sanz, no consiguió superar el corte.
En lo más alto de la clasificación, la francesa Celine Herbin se ha unido a la inspirada rookie danesa Emily Pedersen. Como si de un match-play se tratara, sabiendo en cada momento lo que hacen sus rivales, las dos jugadoras tendrán gracias a sus cuatro golpes de ventaja el destino del torneo en sus manos. Veremos de qué pasta esta hecha Pedersen en su lucha por su primera victoria, pero Herbin se mostraba muy motivada y decidida a convertirse en la primera francesa en ganar el open de su país en los últimos 11 años, desde que Stephanie Arricau se impusiera en Golf d’Arras en 2004.
«Realmente estoy deseando jugar mañana», declaró. «Va a ser realmente bonito porque es el Open de Francia y yo soy francesa. Tendré a mil personas a mi alrededor animándome y eso será un plus, a lo mejor el palo número quince de mi bolsa. Realmente estoy deseando que empiece y solo quiero disfrutarlo. Por supuesto que es diferente cuando tienes a tanta gente animando, pero tu solo te concentras en tu juego, tu bola y a dónde quieres mandarla».
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