Genio, maestro, talento… Hay muchos términos con los que definir a Bob Dylan, nombre de guerra de Robert Allen Zimmerman, cantautor estadounidense y una de las figuras más notables de la música contemporánea con más de cincuenta años de carrera a sus espaldas. Pero como sucede con Neil Young, Mick Fleetwood o el desaparecido Lou Reed, no hay mucha gente que sepa que a la ristra de merecidos adjetivos con las que iniciamos esta breve pieza que suelen acompañarle podemos adjuntar el sustantivo «golfista».
El autor de discos seminales como The Times They Are a-Changin’ o Blonde on Blonde es un apasionado del golf desde hace muchos años aunque mantenga un hándicap medio más o menos discreto (17, si bien Dylan afirma que lleva estancado casi veinte años con ese mismo hándicap). Aunque juega habitualmente en el Malibu Country Club, Dylan pagó más de dos millones de libras en 2007 para hacerse con una mansión de diez habitaciones en las estribaciones de las Cairngorms de las Highlands escocesas y a tiro de piedra del club de golf Abernethy.
Siguiendo con la relación entre Dylan y el golf, hace unos días tuvimos la ocasión de ver a John Daly y a Kenny G interpretar una versión del Knockin’ on heavens door, tema compuesto por Bob Dylan perteneciente a la banda sonora de Pat Garrett & Billy the Kid, película de Sam Peckinpah en la que el compositor también lucía palmito en pantalla. La actuación tuvo lugar en el Mission Hills World Celebrity Pro-Am, pachanga benéfica que reunió a un buen número de famosos y de jugadores de primera fila en el complejo chino de Mission Hills y Daly volvió a demostrar sus buenas maneras a la guitarra y al micro.
No es la primera vez que Daly, músico apreciable con dos discos de country en su haber, se atreve con este tema en tierras asiáticas. Durante el Thailand Golf Championship de 2011, y ataviado con un atuendo discreto, ya tocó esta canción.
Acabamos con una versión llevada al terreno del golf de otro himno, The Times They Are A-Changin’. En este caso lo que quiere cambiar el intérprete, el cómico Matty Blake (presentador del programa Off Par en Back9Network ) es su swing al ritmo cadencioso de la canción de Dylan.
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