Brendan Steele no llevaba, hasta ahora, la temporada más exitosa de su carrera. El jugador que ganó el Valero Texas Open en el 2011 había luchado por la victoria a comienzos de año en Phoenix, pero llegó a encadenar una mala racha de seis cortes fallados que le llevaron a ocupar la nonagésimo séptima plaza en la FedEx Cup. Algo en su swing no terminaba de carburar. En el golf, a veces, un pequeño estímulo puede romper con estas tendencias negativas. Steele salió al Glen Abbey Golf Course y se olvidó por completo de su trayectoria o sus objetivos, y los birdies cayeron con rapidez.
“Me encanta estar aquí”, declaró tras firmar una primera vuelta de 65 impactos en el RBC Canadian Open. “Jugué en el 2006 y el 2007 en el PGA Tour Canada, y me preparó muy bien para competir en el Web.com Tour los tres años siguientes. Fue una gran progresión. Me lo pasé muy bien, hice muchos amigos y estuve dos veranos viajando por el país”. Puede que fueran esos buenos recuerdos los que le hicieran sacar lo mejor de sí mismo en este diseño de Jack Nicklaus, ya que nadie fue capaz de igualarle en la clasificación. “Pegué muy buenos golpes y fui capaz de embocar varios putts”, continuó. “En general, fue un gran día, probablemente la vuelta más completa de todo el año. No fallé greenes, no pegué golpes descentrados y fui capaz de meter putts”.
Y realmente, no es necesario nada más para alcanzar un resultado similar a su menos siete. Glen Abbey es un terreno franco, donde los buenos golpes se recompensan, y sus greenes están en un estado espléndido; fueron muchos los que consiguieron embocar su bola desde distancias ridículamente largas. Con sus ocho birdies y un eagle, Steele partirá en la segunda jornada con un impacto de ventaja sobre Scott Brown, Scott Gardiner y Matt Kuchar, que entregaron un 66 en casa club. “Las condiciones fueron perfectas”, declaró este último, que ya lleva dos victorias en el PGA Tour en lo que llevamos de año. “La semana pasada, las condiciones fueron muy duras en el British Open, por lo que venir aquí y jugar un golf más amable, más como estamos acostumbrados en el circuito, es genial”.
De proseguir con su ataque esta semana, Kuchar podría acercarse a Tiger Woods en la carrera por ser el hombre con más triunfos de la temporada. David Lingmerth, Chez Reavie y Hunter Mahan intentarán ponerle las cosas difíciles desde el menos cinco. “Me di muchas oportunidades y la bola está rodando genial en el green”, declaró Mahan, que todavía no ha conseguido su primera victoria del año. “El campo está perfecto”. En estas circunstancias, tan ajenas a las que se enfrentaron hace unos días en Muirfield, todos pueden caminar más tranquilos. La presión, sin embargo, promete hacer mella en algún momento a lo largo del campeonato: no quedan muchas semanas para que comiencen los Playoffs de la FedEx Cup y son muchos los que quieren asegurarse una plaza entre lo más granado del circuito.
Brandt Snedeker abrió con un 70, mientras que Ernie Els y el campeón defensor, Scott Piercy, lo hicieron con 71. Luke Donald, Charl Schwartzel y Mike Weir hicieron 73 golpes, Dustin Johnson firmó 75 y Graeme McDowell un 76.
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