La californiana vuelve a alzarse con un triunfo 9 años después y, pese a la ventaja con la que contaba, no le ha sido nada sencillo proclamarse vencedora del Lorena Ochoa Invitational.
Tras muchos años de vagar sin rumbo por los campos de golf y de una depresión que a punto estuvo de costarle la vida, ya que en muchas ocasiones llegó a pensar en suicidarse, Christina vuelve a ser feliz, vuelve al lugar que hace casi una década abandonó y vuelve a sonreír haciendo lo que más le gusta: jugar al golf.
Todo parecía ir sobre ruedas para una Kim que llegaba a situarse con 5 golpes de ventaja en los primeros compases de la jornada. Pero Shanshan Feng estaba dispuesta a aguarle la fiesta. La china, sin mayor motivación que llegar a -15 y quedar segunda en solitario, se encontraba sorprendentemente compartiendo el liderato con Kim tras embocar su chip en el 15 y conseguía mantenerse en el co-liderato hasta el final. En ese momento, el torneo se fue a en un emocionante play off a dos hoyos en el que la estadounidense se hizo con la victoria en este Lorena Ochoa Invitational.
Enfundada en un gigante sombrero mexicano y de manos de la increíble Lorena Ochoa, Kim recibía su preciado trofeo. «No puedo describir con palabras cómo me siento ahora mismo. Es surrealista, estoy sobrepasada por las emociones. Me siento orgullosísima de ser la campeona de un torneo tan increíble» afirmaba emocionada a los medios.
Azahara Muñoz, gracias a su vuelta final de 73 golpes, culminaba su actuación en séptima posición, un puesto que la mantiene en la décima plaza de la Race to CME Globe a falta del torneo final, pero que le imposibilita tener opciones de llevarse el orden de mérito al estar fuera de las nueve mejores. Grandísima temporada de todas formas para una Azahara que se ha confirmado como una de las grandes del LPGA Tour y que se ha encargado poner el golf español en la mejor de las posiciones.
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