Una vez que se confirmó que efectivamente Tiger estuvo esta semana jugando una ronda en Augusta para ver cómo andaba su juego de cara al Masters que se celebra a partir del próximo jueves, solo quedaba por saber si las sensaciones eran las adecuadas y la presencia de Tiger en el primer major de la temporada terminaría por ser una realidad. Sin embargo, las cosas siguen en el mismo punto tras trascender que la vuelta no llegó a ser lo esperado por Woods.
Acorde con las informaciones proporcionadas por GolfWeek, el californiano jugó junto a dos socios del club y terminó sus dieciocho hoyos con 74 golpes, un más dos que no debió de dejarle del todo satisfecho y que no cubría las expectativas del cuádruple ganador de Masters. Según las fuentes de GolfWeek, a pesar de hacer cinco birdies el juego corto de Tiger seguía mostrando carencias e incluso tuvo alguna escapada chipeando parecida a las que dieron la vuelta al mundo hace más de dos meses, cuando intentando llegar a bandera su golpe salía sin control para ir al búnker al rough de green, mostrando serios problemas en las distancias cortas.
Horas después, Tiger anunció que jugará esta edición del Masters de Augusta. Recordemos que el californiano no se planta en un torneo desde que se retiró del Farmers Insurance Open tras jugar once hoyos el pasado 5 de febrero y eso le ha hecho salir del top 100 mundial, un hito negativo en su carrera.
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