Zona Pro
El impredecible calendario de Rory McIlroy
Enrique Soto | 31 de marzo de 2013
Tras disputar la segunda jornada del Shell Houston Open, Rory McIlroy decidió añadir un torneo más a su calendario antes del Masters. Se trata del Valero Texas Open, que se celebrará en San Antonio la semana que viene. El número dos del mundo lo decidió con la ayuda de su caddie, J.P. Fitzgerald, mientras comía. “Terminé pensando para mí mismo: ‘Vamos a hacer lo que es mejor para mí en las próximas dos semanas’”, comentó a los medios. “Lo que es mejor para mí es la competición y jugar vueltas”.
No es la primera vez que el norirlandés decide hacer cambios de última hora en su planificación de la temporada. El año pasado se comprometió a jugar el St. Jude Classic la semana anterior a la disputa del U.S. Open, donde defendía el título logrado en 2011, después de fallar dos cortes consecutivos. Allí empató en séptima posición para terminar fallando el corte en el segundo grande de la temporada. La historia podría repetirse en las próximas semanas. Después de tres jornadas en Houston, Rory marcha cuadragésimo octavo con un acumulado de menos dos, y a pesar de dar buenas muestras de recuperación su nivel de juego todavía anda muy lejos del que desplegó a finales de 2012.
“Siento que todo va bien en mi juego”, declaró. “Se trata de jugar algo más de golf competitivo y volverme un poco más fino. Me siento algo oxidado a veces. Creo que es una buena decisión. Estoy deseando jugar unas cuantas vueltas más antes de ir a Augusta”.
Este cambio de planes ha hecho que tenga que cancelar un viaje de dos días que iba a hacer a Haití, que ya efectúo antes de ganar el U.S. Open de 2011. McIlroy es embajador de UNICEF y ha mostrado su compromiso con esta organización en varias ocasiones. “Soy un gran seguidor de lo que hacen por todo el mundo. Espero poder compensarlo de alguna manera”.
Ya es la segunda temporada consecutiva en la que el norirlandés baja drásticamente su nivel de juego y se ve forzado a hacer cambios en su planificación. Los signos en Houston, como dice, son positivos y a lo largo de tres jornadas promedia más del setenta por ciento de calles y greenes en regulación. El ligero calendario que había planificado hasta estas fechas ha demostrado ser, sin embargo, de nuevo insuficiente para sus aspiraciones.
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