Zona Pro
El torneo donde empezó todo
Enrique Soto | 22 de mayo de 2013
Ha pasado un año desde que Carlota Ciganda consiguiera su primera victoria en el Ladies European Tour. Desde entonces, la carrera de la navarra ha sido una sucesión prácticamente continua de éxitos, corroborando su gran talento con otro triunfo en China y convirtiéndose en la primera jugadora desde Laura Davies en ganar la Orden de Mérito del circuito en su temporada rookie. Esta semana Carlota vuelve al punto donde comenzó todo, en el Deloitte Ladies Open, que este año se disputa en The International Golf Club (Amsterdam).
La gran cantidad de expectativas que ha levantado durante su corta carrera no han impedido que siguiera rindiendo a un gran nivel en lo que llevamos de temporada. Carlota está cociendo a fuego lento su tercera victoria como profesional, del mismo modo que lo hacen otras jugadoras capaces de acumular dos segundos puestos de forma consecutiva. Primero fue en Texas, donde la número uno del mundo le impidió su primer triunfo en el Circuito Americano; unos días después, en Turquía, en un recorrido capaz de generar resultados impropios de unas profesionales de este nivel. La insistencia puede dar sus frutos esta semana en Holanda y sería un punto de inflexión muy interesante para lo que se le avecina durante los próximos meses. En dos semanas, el segundo major del año; en poco más de un mes, el U.S. Open y, al final de la carretera, la Solheim Cup, para la que está clasificada provisionalmente en segunda posición.
Las mejores jugadoras del mundo se encuentran esta semana en las Bahamas, compitiendo en el LPGA Tour, pero no por ello las rivales de la navarra le pondrán las cosas fáciles. Holly Clyburn, Trish Johnson, Carly Booth o Melissa Reid han rendido a buen nivel durante los últimos torneos o están en el camino para volver a alcanzarlo, y también estarán presentes en Amsterdam. Junto a todas ellas, otras cinco españolas: Virginia Espejo, Marta Silva, Tania Elósegui, María Hernández y Laura Cabanillas.
Sus miras son, por ahora, distintas a las de Carlota y se centran en destacar en los suficientes torneos como para, primero, conseguir la tarjeta o asegurarla de cara a la próxima temporada. Tal es el caso de Virginia Espejo y Marta Silva, que afrontan su primer curso en el profesionalismo alternando buenas actuaciones con otras más discretas. En el caso de la madrileña, todavía tiene pendiente superar un corte, pero viene de una victoria en el Circuito de Profesionales de Madrid que puede haber disparado su confianza. En el de la gallega, que solo ha disputado dos torneos, intentará, por lo menos, igualar su actuación en Marruecos, donde finalizó decimoséptima.
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