Sergio García sigue dando muestras de solidez, buen juego y, sobre todo, paz mental en Valderrama, un campo que pone a prueba los nervios de todos los golfistas y que supone un reto inabordable para jugadores que acostumbran a manejarse con soltura bajo par en cualquier otra circunstancia. El de Castellón sigue siendo el mejor español en un durísimo Andalucía Masters, a tres golpes del escocés Richie Ramsay, y uno por delante del malagueño Miguel Ángel Jiménez.
Hay un dato significativo y concluyente a la hora de definir este este Andalucía Masters 2011: se ha pulverizado la marca de este año en el European Tour con respecto al corte más alto en un torneo, dado que el +7 que ha servido de filtro en Valderrama es tres golpes superior al +4 que, hasta esta semana, era la referencia de “dureza” en un torneo (marca que se alcanzó en el Open de Madeira o en el BMW PGA Championship, entre otros).
Después de la montaña rusa del jueves, Sergio ha llevado una vuelta ordenada y sin sobresaltos, bien desde el tee, resolutivo con el putt y espectacular con el juego corto para acabar con un aseado -1 en el día y -2 en el total. Sus chips mágicos en los hoyos 11, 12, 14 y 16, el primero embocado para birdie y los otros tres para salvar situaciones complicadas sin apuros) le han servido para superar las dificultades en las que se ha metido en un día difícil, con viento intenso y greenes vertiginosos.
“Ha sido una vuelta muy consistente. He salvado un par de pares muy buenos y quizá podría haber sido algo más agresivo con el putt, pero había mucho viento y algunos de los putts eran rapidísimos. En cualquier caso, ha sido una vuelta positiva”, explicaba Sergio al finalizar la jornada.
“Estoy muy fino con el juego corto. Siguen faltando un par de detallitos, pero estoy recuperando el toque. Hoy el campo estaba difícil por el viento y era complicado coger calles y acertar con el palo correcto. Menos mal que está blando, porque si no, esto sería un infierno”, agregaba el de Borriol.
Miguel Ángel Jiménez es otro jugador que le tiene ganas a Valderrama, otro de los despechados de este bello campo gaditano. Como Sergio, segundo en tres ocasiones, Jiménez se quedó a las puertas del título en aquel American Express que le birló en el desempate Tiger Woods y lleva desde entonces con ganas de resarcirse.
En la segunda vuelta, Jiménez ha conseguido darle la vuelta a una situación muy comprometida después de haber encajado cuatro bogeys en seis hoyos, para reaccionar con birdie-eagle en los hoyos 10 y 11, restar otro golpe en el 15 y defenderse en el tramo final (con sufrimiento en el 18, donde el jueves hizo doble bogey) para acabar cuarto, con -1 en el día y en el global.
“¡El par del hoyo 18 me ha sabio a gloria! La verdad es que no sé cómo meterle mano a este hoyo y con el par me voy muy contento. No ha sido un día fácil debido al viento cambiante. Este es un campo muy técnico que te exige mucho y no hay más que ver que el corte se ha pasado con + 7. Hay que pegarle muy derecho y poner la pelota en su sitio”, indicaba el de Churriana.
“Mentalmente, es muy duro. Hemos estado más de cinco horas en el campo y aquí la clave es ser paciente. No se puede atacar con demasiada agresividad, porque eso te castiga. Estoy a cuatro golpes del líder, que no son tantos a falta de 36 hoyos. Hay que hacer lo que sea para acabar bajo par. Este campo hay que jugarlo con mucho respeto y hay que ir hoyo a hoyo, golpe a golpe”.
La tercera pata del banco español en Valderrama es Alejandro Cañizares, sexto con +1 después de una vuelta luchada, algo peor de tee a green que el primer día, fino con las recuperaciones y acertado con el putt. Desde su puesto 115º en la clasificación de la Race to Dubai, a horcajadas entre la salvación y el purgatorio de la escuela de clasificación, Cañizares podría dar el paso definitivo en Valderrama para asegurar su puesto en 2012 en el European Tour.
Dados los guarismos que se están dando en Valderrama, podría decirse que todos los que han superado el corte tienen opciones de luchar por el torneo, y entre ellos están otros cinco españoles. Gonzalo Fernández-Castaño ha estado sobrio para acabar con +1 en el día y +3 en el total, Pablo Larrazábal está vigésimo sexto, con +5 (lástima de los tres bogeys finales), Nacho Garrido figura en la trigésimo sexta posición con +6 y Manuel Quirós, Rafa Cabrera-Bello y José María Olazábal han terminado con +7, compartiendo la cuadragésimo cuarta plaza.
Olazábal, además, se metía el fin de semana con un gran putt en el 18, una justa culminación para el esfuerzo que el vasco nunca escatima.
“Ha sido una semana de sufrimiento, pero el putt de seis metros del 18 me ha servido para jugar el fin de semana. Por muy bien que estés jugando, este campo se las trae. La exigencia es máxima y la precisión que te exige, también máxima. Es tan exigente que hay que salir a luchar, aunque siempre he luchado todo lo que he podido. Eso es lo que he aprendido desde pequeño y tuve un buen mentor, Seve, que me enseñó lo mismo. El hecho de luchar y obtener recompensa siempre ayuda”, explicaba el capitán Ryder.
Por el contrario, Álvaro Velasco, Carlos Suneson, Álvaro Quirós, Santiago Luna y Carlos del Moral no tendrán la oportunidad de vérselas el sábado con este fiero Valderrama.
Deja un comentario