Es curioso las vueltas que puede dar la vida. Hace una semana Geoff Ogilvy terminaba empatado en la trigésimo cuarta posición en el RBC Canadian Open y se planteaba seriamente acudir a Reno para competir en el Barracuda Championship, torneo paralelo al WGC Bridgestone Invitational organizado por el PGA Tour. La distancia entre ambos torneos, el cansancio acumulado y, sobre todo, la frustración por la falta de resultados a pesar de su juego hacían dudar al australiano de la idoneidad del viaje. Al final, Ogilvy tomó la decisión de volar hasta Nevada y el resultado fue el mejor posible: triunfo, tarjeta asegurada para el año que viene y clasificado para jugar el último grande de la temporada, el PGA Championship que comienza el jueves en Valhalla.
El australiano acumuló un total de 49 puntos para llevarse el torneo después de acabar el domingo con 14 tras cinco birdies, un eagle y un bogey. El sistema de puntuación era una modificación del formato Stableford en donde un albatros sumaba ocho puntos, un eagle cinco, un birdie dos, el par no añadía nada, se restaba un punto si se cometía un bogey y tres en el caso de firmar dobles bogeys o un resultado peor, todo ello con el objetivo de buscar un juego más agresivo por parte de los participantes.
Ogilvy estuvo fino y a lo largo de la semana consiguió 16, 7, 12 y los finales 14 puntos en las diferentes rondas para llevarse el trofeo con cinco puntos de ventaja sobre Justin Hicks. Este es el octavo triunfo del australiano en el circuito y el primero desde 2010 en Hawái, aunque probablemente la mejor recompensa sea mantener la tarjeta para el año que viene en el Tour gracias a la exención que le da la victoria en Reno.
El australiano no estaba completando una gran temporada y sus mejores resultados eran un par de top 25 que no le valían para estar dentro de los 125 primeros en la FedEx Cup (límite de los que mantienen la tarjeta), de hecho, antes del Barracuda Championship Ogilvy estaba en la 151ª posición. Con los 300 puntos que obtiene el ganador se ha disparado hasta la 85ª plaza, lo que le mete de lleno en los playoff de la FedEx Cup.
La satisfacción por este resultado no dejaba escapar una cierta amargura por una temporada que no estaba resultando para nada como esperaba el ganador del US Open de 2006.
“Ha sido muy duro tener que hacer la bolsa en los vestuarios para marcharte después de no pasar cortes o terminar mal los torneos. La gente ve en televisión a los jugadores ganar, la alegría, pero puede ser muy deprimente también pasar tanto tiempo fuera de casa, pegándote cabezazos contra la pared por los resultados y sintiéndote totalmente frustrado. Quizás la palabra depresión sea un poco fuerte, pero sí que es frustrante”, explicó un sincero Ogilvy, que ve como las nubes se dispersan un poco tras su victoria en Reno.
Segundo en el torneo quedó Justin Hicks, que cerró una gran vuelta con 18 puntos para un total de 44 en el agregado. Empatados en la tercera posición quedaron John Huh y Jonathan Byrd con 37 puntos finales. Nick Watney, que había liderado el torneo durante las dos primeras rondas y que salía tres puntos por detrás de Ogilvy el último día, terminó en la octava posición tras una última ronda donde solo pudo sumar 2 puntos.
Aquí os dejamos el resumen en vídeo de la victoria de Ogilvy.
Deja un comentario