Si ayer hablábamos de que las condiciones en las que se disputaría este Women’s British Open plantearían una batalla por la supervivencia a las jugadoras, hoy los pronósticos acertaron de pleno, hasta el punto de que la jornada tuvo que ser suspendida. El viento barrió toda la planificación de la semana, a pesar de que doce partidos salieron al campo. El resultado fue un total desconcierto.
Felicity Johnson comenzó su vuelta con un resultado de seis sobre par y, en solo tres hoyos, dobló su número de golpes perdidos respecto al campo. Firmó un nueve en el par 4 del hoyo 1, que se jugaba con el viento de cara, siguió con un bogey en el segundo y otro doble bogey en el tercero. Ocho mas en tan solo tres hoyos. Muy similar el caso de Caroline Masson, que encadenó tres dobles bogeys seguidos.
“Las jugadoras comenzaron su vuelta en condiciones extremas, que además fueron a peor a pesar de que se estabilizarían”, recalcó Susan Simpson, responsable de la Ladies Golf Union. “Hubiera sido injusto para aquellas competidoras no declarar el juego nulo y cancelar sus resultados de esta vuelta”. De este modo, cualquier jugadora que haya participado en la segunda jornada tendrá que volver a comenzar su vuelta, y no se contará el resultado que haya realizado en estas condiciones.
La regla aplicada por el Comité es la 33-2d, que dice: “Si el Comité o su representante autorizado considera que por alguna razón el campo no está en condiciones de juego o que hay circunstancias que hacen imposible la realización apropiada del juego, puede, en el Juego por Hoyos (Match Play) o en el Juego por Golpes (Stroke Play), ordenar una suspensión temporal del juego o, en el Juego por Golpes (Stroke Play), declarar nulo y no valido el juego y cancelar todos los resultados de la vuelta en cuestión. Cuando se cancela una vuelta, todas las penalidades incurridas en esa vuelta se cancelan”.
Aunque se ha despertado cierta polémica al obligar a las jugadoras a salir al campo, Simpson ha sido muy clara: “En lo que a nosotros respecta, esta mañana el campo estaba jugable. En el momento en que lo suspendimos, las bolas se movían. Veinticinco millas por hora era la máxima velocidad del viento que habíamos captado, pero se mantenía estable entre dieciocho y veinte. Revisamos la situación y paramos el juego. Tenemos que hacer lo correcto para el devenir del torneo”, concluyó. Sin embargo, las reacciones en contra de la decisión tomada no se han hecho esperar. Karen Stupples bromeaba con la situación a través de Twitter, donde comentaba: “Se suspende el juego debido a que el viento se está llevando a las jugadoras”, mientras que Cristie Kerr se mostró mucho más seria: “Nunca debimos salir a jugar”.
El juego ha sido suspendido durante todo el día y se reanudará mañana sábado a las 6:50 horas. El domingo se jugarán las dos vueltas restantes y solo pasarán el corte las 50 mejores, aunque recibirán premio económico las 65 primeras clasificadas.
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