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Las europeas cobran ventaja con polémica en la Solheim Cup

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Redacción | 20 de septiembre de 2015

Para mucho han dado los hoyos que quedaban por disputar de la jornada vespertina de fourballs de la Solheim Cup que hubo que aplazar por falta de luz. Eran tres partidos los que restaban por concluir y Estados Unidos lideraba en dos de ellos, con lo que a priori podían dejar en dos puntos la ventaja que llevaba el combinado europeo (que, recordemos, finalizaba ayer 8-5), pero el desenlace del partido final sorprendió a todos los congregados en el Golf Club St. Leon-Rot.

Para empezar, Stacy Lewis y Gerina Piller hacían valer el hoyo de ventaja que habían adquirido para adjudicarse el punto, aunque Caroline Hedwall tuvo un último putt para igualar el marcador. Por detrás, Icher y Matthiew superaban a Salas y Lang por dos hoyos y ponían el 9-6 en el marcador, lo esperado según lo visto en la jornada anterior.

Y la bomba llegaba en el último partido, que las europeas empataban con un gran birdie de Charley Hull en el hoyo 16. A continuación, en el 17 y con Brittany Lincicome fuera de juego, las otras tres componentes del partido se procuraban opciones de birdie, siendo la de Alison Lee la más clara. Después de los fallos de las dos europeas, le llegaba el turno a la joven Lee, cuya bola se pasaba poco más de dos palmos del hoyo. Las europeas echaban a andar para salir del green y Lee recogía la bola pensando que le habían concedido el putt, pero el árbitro decretó que las pupilas de Carin Koch habían ganado el hoyo.

Las miradas de incredulidad se tornaron en incomprensión cuando Suzann Pettersen dejó claro que ella no había concedido nada, y en el fuego cruzado se vio metida una Charley Hull que hubiera preferido estar en cualquier otro lado. Luego, las europeas empataban el hoyo 18 con par y se adjudicaban un enfrentamiento enrarecido por lo ocurrido en el hoyo 17.

Enseguida se formaron varios corros en el green y, pese a que casi todas las conversaciones entre las europeas tuvieron lugar en sueco para preservar la intimidad, Pettersen no pareció encontrarse con mucha comprensión sobre su actitud por parte de los miembros del equipo técnico europeo, mientras que a Charley Hull y Alison Lee les vencían las emociones y acababan llorando cerca de la última bandera.

Aunque Pettersen defendía su postura con un contundente «Hemos jugado según marcan las normas», la situación recuerda en exceso al agravio sufrido por Annika Sorenstam en la edición de la Solheim Cup de 2000 disputada en Loch Lomond, cuando las americanas Kelly Robbins y Pat Hurst le obligaron a repetir un chip que había embocado porque estaba unos centímetros más cerca que la bola de una de sus rivales, que reposaba en el green. En aquel entonces la ahora vicecapitana también lloró en aquel green escocés y dejó patente que una cosa es la letra de la ley y otra muy distinta el espíritu. Por desgracia, quince años después se ha vuelto a dar una situación similar y ahora solo falta ver cómo influye el incidente en el desarrollo de los partidos individuales, si sirve de lastre para las europeas o acicate para las estadounidenses.

Evidentemente, es un punto de los diez que han sumado las europeas y no debería empañar la gran actuación de las continentales hasta el momento, pero la sombra de la polémica vuelve a enturbiar esta magnífica competición.

En la jornada final, Carlota Ciganda abre campo contra Lexi Thompson, la mejor estadounidense hasta la fecha, y Azahara Muñoz saldrá en la octava plaza y jugará contra Lizette Salas.

Resultados parciales

Partidos individuales

Carlota Ciganda – Lexi Thompson
Catriona Matthew – Morgan Pressel
Karine Icher – Brittany Lincicome
Melissa Reid – Brittany Lang
Gwladys Nocera – Alison Lee
Caroline Masson – Gerina Piller
Ana Nordqvist – Stacy Lewis
Azahara Muñoz – Lizette Salas
Suzann Pettersen – Angela Stanford
Charley Hull – Cristie Kerr
Caroline Hedwall – Michelle Wie
Sandra Gal – Paula Creamer