Por cortesía de IMG y Golfing World, ofrecemos a los lectores de Crónica Golf una serie de semblanzas en vídeo de los componentes del equipo europeo de la Ryder que lucharán por defender el título este fin de semana en Medinah, Chicago. Comenzamos con los integrantes del equipo capitaneado por José María Olazábal, que defenderán el título logrado en Celtic Manor en el año 2010.
Cuatro caras nuevas respecto a la última edición: Sergio García, Paul Lawrie, Nicolas Colsaerts y Justin Rose sustituyen a Ross Fisher, Padraig Harrington, Edoardo Molinari y Miguel Ángel Jiménez. A pesar de que el combinado europeo ha salido victorioso en seis de las últimas ocho Ryder Cup, no parte como claro favorito al trasladarse la competición a territorio enemigo. La influencia del público en el evento golfístico más seguido del planeta es grande pero los europeos cuentan con un aliciente respecto a otros años: nunca sus jugadores habían rendido a tan buen nivel, hasta el punto de ocupar cuatro de los cinco primeros puestos del Ranking Mundial.
Rory McIlroy
El número uno indiscutible. Rory posee tanto talento que cuando alcanza su última velocidad siempre termina en lo más alto, sin importar las circunstancias. Durante las últimas semanas ha conseguido algo solo reservado a ciertos nombres en la historia de este deporte: despejar el azar de la ecuación, convertirse en un valor seguro y constante sin importar el estado de su swing o su eficacia con el putter. Ganador del PGA Championship y de tres torneos del PGA Tour esta temporada, llega a la Ryder después de haber dejado atrás a todos los integrantes del equipo americano en los Playoffs de la FedEx Cup. Nadie fue capaz de igualarle. La única preocupación que puede transmitir está relacionada con la fatiga, tanto mental como física, porque lleva compitiendo sin descanso durante el último mes.
Martin Kaymer
Ganador de un major y pasado número uno del mundo, Kaymer tomó la difícil decisión de intentar convertirse en mejor jugador en el momento más dulce de su carrera. Ese salto al vacío dice mucho de su ambición y aspiraciones, a pesar de que los resultados no han sido los esperados. El objetivo de cambiar el vuelo natural de su bola al draw para ganar en Augusta se vio totalmente frustrado cuando el alemán vio en peligro su presencia en la Ryder. Fue la señal que le alertó de que quizá aquella no fue la decisión más adecuada o, por lo menos, la que mejor se adaptaba a sus posibilidades. Una temporada aciaga y miles de bolas después, Martin llegará a Medinah después de haber vuelto a sus orígenes y finalizar vigésimo primero en Holanda y quinto en Italia; los dos últimos campeonatos disputados en el Circuito Europeo. Kaymer se encuentra recorriendo un sendero ya conocido, aunque su verdadero estado de forma sigue siendo una incógnita.
Peter Hanson
Resulta sorprendente que un jugador de la categoría de Peter Hanson haya conseguido solo cinco victorias en el Circuito Europeo. Clasificado holgadamente para formar parte del equipo de la Ryder, el sueco termina entre los diez primeros en prácticamente todas sus apariciones. Desde hace unas temporadas ha focalizado toda sus esfuerzos en rendir bien en las grandes citas y está obteniendo los resultados, llegando a liderar el pasado Masters y finalizando séptimo en el PGA Championship. El camino a Ítaca es largo, debe pensar, y la evolución necesaria para terminar levantando un grande pasa por crearse más oportunidades de victoria. Volvió a ganar hace unas semanas en Holanda y cuenta con un arma fundamental para rendir bien esta semana en Medinah: lidera las estadísticas de putts por green en regulación en Europa.
Ian Poulter
He aquí un jugador que despliega su mejor golf cuando tiene a un rival enfrente, exigiéndole al máximo en cada impacto. Poulter fue concebido para jugar en match play del mismo modo que un martillo es fabricado para golpear, no hay más que mirarle a los ojos cuando empata un partido. Totalmente imprevisible, es capaz de encadenar una racha incesante de birdies o igualar encuentros en los últimos instantes, pero siempre alentando a sus compañeros y expirando pasión por esta, su competición. Poulter siempre vuelve cuando se trata de la Ryder.
Nicolas Colsaerts
Avalado por su impresionante capacidad de enviar la bola al infinito, el gran bombardero belga ha pasado de ser una gran promesa a toda una realidad. Su presencia en el equipo europeo es el regalo a un esfuerzo continuo que le ha llevado compitiendo por medio mundo durante los últimos meses. Desde China a Estados Unidos, cuando su presencia en la Ryder todavía era una incógnita. Una vez alcanzado el objetivo, se enfrenta a su semana más importante como profesional y ha estado entrenando su putter por encima de otras áreas del juego. En esos últimos metros hasta el hoyo estará la clave para escribir su historial en esta competición con letras doradas o con un pulso temeroso. Su debut, seguramente, vendrá de la mano de un jugador más experimentado.
Francesco Molinari
Al igual que Hanson, Molinari parece tener problemas para cerrar definitivamente los torneos (solo tres victorias en su carrera), pero a diferencia del sueco sus problemas sí que están en los greenes. Francesco produce tantas oportunidades de birdie por vuelta que muchos días parece perder de vista el camino hasta el hoyo. No ha fallado un solo corte en Europa esta temporada y además de su victoria en el Open de España, ha sumado otros siete top10. Si quiere rendir mejor que en la pasada edición (un punto de tres posibles) deberá afinar su putter en los momentos cruciales. Su gran virtud: de tee a green es un autómata, y eso es capaz de desesperar al jugador más veterano.
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