Seis años ha necesitado el escocés Jamie McLeary para conseguir su segundo título en el Challenge Tour. En 2009 fue un triunfo en su casa, en el Scottish Hydro Challenge y en 2015, por fin, le ha llegado su momento en el KPMG Tropy disputado esta semana en Bélgica.
McLeary ha empezado muy bien el recorrido, ningún fallo y cinco birdies en la primera vuelta, con la clara intención de alejarse de sus perseguidores lo antes posible. Los tres putts del hoyo catorce volvieron a dar alas a sus competidores que acortaban distancias. Al final, el escoces llegaba al hoyo dieciocho con un golpe de ventaja y conocedor de que un par le valdría para alcanzar la victoria.
«Estaba más nervioso al principio que al final. Tuve una mala salida y en el segundo golpe tuve suerte. Normalmente cuando estoy nervioso no le doy bien a la bola y cuando se lidera un torneo uno quiere tener un buen comienzo.”, manifestaba McLeary. “Mi juego corto ha sido mucho mejor que el de ayer y ahí es donde ha estado la clave del resultado”.
McLeary perdió la tarjeta del Tour Europeo el año pasado, pero ahora recupera la idea de regresar a la primera división del golf continental. “Voy a poder entrar en los torneos lucrativos. Ahora iré al Rolex Trophy, uno de mis torneos favoritos y participaré en todos los torneos de China. Estoy muy feliz.”
Taco Remkes ha tenido que conformarse con la segunda plaza habiendo disputado también un gran torneo. El holandés ha firmado nuevamente una tarjeta de 67, como ya había hecho en dos de los tres días anteriores. El holandés se mostraba muy satisfecho con el resultado y más aun después de someterse a cirugía en la espalda en 2014, momento complicado en el que vio peligrar su futuro en el golf.
“Cuando Jamie hizo bogey en el 14 pensé que era mi oportunidad. Hice birdie en el 16 y 17, pero no lo conseguí en el 18. Jamie ha jugado muy bien toda la semana y merece ganar. Yo estoy bastante contento porque terminar entre los diez primeros me permite estar en Saint-Omer la próxima semana”, declaró Remkes.
Un total de seis bogeys, cuatro de ellos ya en la primera vuelta, han cortado de raíz las aspiraciones de Sebastián García de conseguir en este torneo un mejor resultado que la vigésimo quinta plaza en la que ha finalizado. El madrileño partía a un golpe de la cabeza y tenía un arranque prometedor, con tres birdies (y un bogey) en los cuatro primeros hoyos, pero las esperanzas se fueron diluyendo a partir del hoyo 6 a causa de sus errores combinados con los aciertos de McLeary.
Los otros dos españoles que habían superado el corte, Carlos Aguilar y Agustín Domingo han acabado en el global con un golpe sobre el par, empatando en la quincuagésima posición.
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