Noh puede ser un desconocido para el gran público estadounidense, pero el surcoreano lleva muchos kilómetros y hoyos a sus espaldas. Después de su irrupción en el primer plano mundial a nivel amateur a su triunfo en el Maybank Malaysian Open del European Tour, llegó al PGA Tour con solo 19 años y ganas de hacerse un hueco entre la élite. Tres años después, tiene a su alcance romper la hucha de las victorias.
No ha sido un trayecto fácil para el surcoreano, que el año pasado se vio obligado a jugar las series finales del Web.com Tour para recuperar la tarjeta en el circuito después de un año decepcionante. Solventaba el compromiso sin excesivos problemas después de imponerse en el Nationwide Children’s Hospital Championship, y escoltado ahora por un caddie de confianza, Scott Sajtinac, parece en condiciones de dar un paso más. De momento, es el primer jugador de la historia que finaliza sin bogeys las tres primeras vueltas en el TPC Louisiana.
Pero Noh tampoco se limita a contener daños y evitar los errores. En la tercera vuelta del Zurich Classic firmó una de las mejores tarjetas del día y finalizó con su segundo 65 de la semana para totalizar -18, dos golpes menos que el estadounidense Keegan Bradley, su principal amenaza.
Por detrás quedan Robert Streb y, en cuarta posición, Ben Martin, líder de las dos primeras jornadas. Las (escasas) esperanzas europeas quedan depositadas en el inglés Paul Casey, mejor vuelta del día, que es séptimo con -13, a cinco golpes del líder.
Noh, además, quiere ofrecer el triunfo a sus compatriotas, una nación golpeada por la pérdida de más de 300 vidas en el reciente hundimiento de un ferry lleno de estudiantes. Sin duda, sería un magnífico colofón para una semana mágica.
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