De testigo de excepción de la exhibición de Matthew Fitzpatrick en Holanda a protagonista de una hazaña similar. Todo eso ha vivido Rafa Cabrera-Bello en el KLM Open: de compartir el 60 del inglés en la jornada de ayer a arrancar con 29 golpes en nueve hoyos y escalar hasta el liderato del torneo holandés, puesto que comparte con el inglés Lee Slattery.
El grancanario tuvo un inicio de jornada demoledor, acribillando las banderas del Kennemer Golf & Country Club y reventando los nueve primeros hoyos con seis birdies, un eagle y un bogey para restarle siete golpes al campo en la primera mitad del recorrido.
«Ha sido un comienzo espectacular. He metido un putt muy largo en el uno y todos los demás birdies eran tirazos a la bandera que dejaba prácticamente dados. Incluso el bogey que hice fueron tres putts desde metro y medio para birdie. Podía haber sido incluso mejor el comienzo, pero bueno… Metiendo el approach ese en el siete fueron 29 por los primeros nueve es un fantástico comienzo», recapitulaba el español.
RCB is tearing it up! Leads after going birdie-birdie-bogey-birdie-birdie-birdie-EAGLE! #KLMOpen http://t.co/EYEQMcPYY1
— The European Tour (@EuropeanTour) septiembre 12, 2015
Luego la vuelta se paró, aunque Cabrera-Bello no se marchaba frustrado por los nueve pares de la segunda mitad del recorrido.
«Solo creo que cedí un golpe en el 12, ya que pegué un drive perfecto al centro de la calle y tenía un hierro seis hasta el green, pero pegué un mal golpe. Es un par cinco, así que esperaba hacer birdie», recordaba el español. «Los demás hoyos los jugué bien pero los putts no entraron. Podría haber hecho uno o dos menos, pero me quedo con el 63».
Llega el desenlace del torneo, la jornada final, el «coco» para Cabrera-Bello esta temporada. Hasta cinco veces ha estado en disposición del luchar por un título este año en el European Tour, pero el triunfo no ha llegado y es su principal cuenta pendiente.
«Este año me he puesto en esta posición más veces que nunca en toda mi carrera. Sé que no todas las veces me ha salido como me hubiese gustado. Cuantas más veces esté aquí, más cómodo me sentiré y más fácil será que me salga mi juego natural y acabaré jugando bien cuatro días. Eso lo sé seguro», concluía el grancanario.
Después de compartir las dos últimas jornadas con Fitzpatrick, mañana se las verá con Lee Slattery, ganador del M2M Russian Open la semana pasada, que finalizaba con -4 en los siete últimos hoyos para empatar con el español. A un golpe, Paul Lawrie, que vuelve a la carga después de su 61 inicial, y a dos impactos, el belga Thomas Pieters, otro de los recientes ganadores del circuito.
En cuanto a los españoles, Eduardo de la Riva es noveno y afronta una jornada que podría ser decisiva para su temporada y para alejarse de la zona complicada de la orden de mérito, Alejandro Cañizares ocupa la vigésimo quinta plaza y Álvaro Quirós se descolgaba hasta la sexagésimo séptima.
La anécdota del día la protagonizaron el sueco Magnus A. Carlsson y el australiano Wade Ormsby, que llevaron la mejor marca histórica de hoyos en uno en una misma temporada del European Tour hasta los 41 después de los que han logrado en esta jornada.
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