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Olazábal: ‘Seve no tenía dobleces y siempre hizo lo que tenía que hacer’

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Óscar Díaz | 08 de mayo de 2011

Olazábal resume la última jornada (foto de Crónica Golf)

José María Olazábal y Miguel Ángel Jiménez son jugadores curtidos en mil batallas, recurriendo al tópico, y se han enfrentado a links traicioneros, a los peliagudos greenes de Augusta, a las preparaciones más extremas del US Open y al abanico más amplio de dificultades golfísticas que se puedan presentar (y no entramos en los problemas físicos que han venido aquejando a Olazábal desde hace más de una década). Sin embargo, la muerte de Seve Ballesteros durante este Open de España probablemente haya sido el golpe más duro que han sufrido en sus carreras.

Las emociones y los sinsabores acumulados en los últimos días han hecho mella en los dos veteranos españoles, que han acabado con la mente en otro sitio y pidiendo la hora. José María Olazábal ha sufrido durante el fin de semana a causa de los recuerdos que no dejaban de acudir a su mente. El de Hondarribia reconocía al acabar la vuelta que hoy no le había salido nada, aunque el cariño del público ha servido para paliar en cierta medida su desencanto.

“Lo he hecho todo mal y eso se ha reflejado en el juego y en el resultado. Es de agradecer el cariño del público y es muy bonito, no cabe duda, pero aquí también estamos para hacer otras cosas y no las hemos hecho bien”.

De nuevo, y ante los medios anglosajones, tuvo palabras de elogio para la figura de Seve Ballesteros, su mejor amigo.

“Hemos perdido a un icono y, a decir verdad, en el mundo del golf, no creo que veamos a otro jugador igual en muchos años. Con su carisma, su pasión en el campo de golf… hay muchos jugadores brillantes, pero no con su carisma”.

“Hizo que confiara en mí mismo y en mis aptitudes y aprendí mucho de él. Entrenamos muchas veces juntos, me enseñó una parte importante de lo que sé alrededor de los greenes, mi juego corto… Me ha aportado muchísimas cosas, como profesional y como persona”.

“Era una persona sin dobleces y siempre hizo lo que tenía que hacer. Recordaré todos los buenos momentos que compartimos, todo lo que ha conseguido. Es un hombre que ha abierto muchas puertas al golf europeo, ya que gracias a él nos encontramos en la situación actual y el European Tour ha crecido gracias a él y a otros jugadores como Nick, Woosie, Bernhard, Sandy o yo. Pero él fue quien dio el primer paso adelante”.

Con respecto a su calendario inmediato, la semana que viene estará en Pula, en el Iberdrola Open, luego acudirá al BMW PGA Championship de Wentworth y, a continuación, cruzará el charco e irá a Estados Unidos.

Por otro lado, Miguel Ángel Jiménez era muy gráfico al acabar la vuelta (y eso que ha acabado +1 en el día gracias a un gran eagle en el 18 con una ovación de gala del público congregado):

“He jugado como el culo. He estado hoy cansado, sin ritmo ninguno y deseando terminar. Con todos los acontecimientos de esta semana se ha perdido la motivación y se ha perdido todo”.

Pese al mal sabor de boca, Jiménez reconocía que se había sentido muy arropado por el público, cuyo cariño correspondía firmando autógrafos durante veinte minutos mientras atendía a los medios.

“El público ha estado magnífico, encantador, siento que me quiere la gente y eso es muy bonito. También he visto a mucha gente nueva y hay que darlo todo por ellos”.

Miguel Ángel confirmaba que ahora se va a casa y luego el miércoles a Pedreña, al funeral de Seve, ya que incluso antes del fallecimiento de Seve ya tenía decidido que no acudiría al The Players Championship. Luego acudirá al Volvo World Match Play Championship, después al BMW PGA Championship, al Open de Gales, se tomará una semana de descanso e irá al US Open.

Calendario apretado para un incansable veterano que sigue teniendo muy presente a su amigo cántabro.