No son muchos los jugadores capaces de liderar un torneo de principio a fin. Cada jornada supone desafíos diferentes, momentos en los que es necesario atacar y otros en que lo mejor es tirar a centro de green y salir sonriendo con un cuatro. A menudo son los más experimentados los que llevan a cabo un dominio tan evidente de un torneo. Han estado en múltiples ocasiones en la piel del aspirante y saben interpretar muy bien qué hace falta para mantener el control de la tabla. Sin embargo, otras veces un joven entra en escena y muestra una madurez impropia de su edad. Es lo que ha sucedido esta semana en el Challenge Tour con Dylan Fritelli.
El sudafricano se situó en primera posición del Kärnten Golf Open con una segunda vuelta de 64 impactos, la mejor del día, y declaró sus intenciones de disputar la tercera como si de un match play se tratase. Su rival, Lloyd Saltman, estaba a solo un golpe de distancia. La estrategia le fue muy bien a Fritelli, que en vez de salir a defender un liderato se dispuso a hacer birdies desde el primero de sus hoyos. El resultado fue contundente: volvió a ser el mejor del sábado, el día del movimiento, y su ventaja se amplió a cuatro golpes. El domingo, sin embargo, sus planes fueron muy distintos.
Decía Horton Smith, el primer hombre en ganar un Masters, que cada torneo son en realidad dos distintos. “Uno el que juego y la gente puede ver, y otro que se disputa dentro de mí”. Fritelli no solo se ha basado en pegar buenos golpes a lo largo de la semana, sino que se ha mostrado completamente certero a la hora de elegir cuáles dar en determinados momentos. Llevaba una media de seis birdies por vuelta antes de afrontar el último día, en un intento de separarse lo más posible de sus rivales, pero con cuatro impactos de ventaja y dieciocho hoyos por delante, se dedicó a contemporizar; evitar en la medida de los posible los grandes errores. Dos birdies, dos bogeys y, quizá lo más impresionante que haya hecho para conseguir su primera victoria como profesional: dieciséis pares con todo el peso del torneo a las espaldas.
“Las condiciones hoy fueron las más duras que hemos tenido toda la semana, por lo que era una cuestión de aguantar y finalizar el trabajo”, declaró el ganador. “Metí putts cruciales en los últimos hoyos que me salvaron el día. Estoy encantado de conseguir mi primera victoria. Me abre muchas puertas. Ahora estoy listo para intentar conseguir la tarjeta del Circuito Europeo a través del Challenge”.
Su triunfo en Austria le sitúa decimosegundo en la Órden de Mérito del circuito. Daan Huizing y Filippo Bergamaschi finalizaron segundos con un acumulado de menos quince, a tres el líder, mientras que Andrew McArthur fue cuarto con menos catorce. Pablo Martín y Manuel Quirós fueron los mejores españoles, empatados en vigésimo séptima posición con menos seis. Jesús Legarrea fue trigésimo sexto, Carl Suneson quincuagésimo segundo, Agustín Domingo quincuagésimo sexto y Luis Claverie quincuagésimo noveno.
Agustín Domingo Antonio Hortal Billy Hemstock Carl Suneson Challenge Tour Daniel Osorio Dodge Kemmer Dylan Fritelli Edouard Dubois Florian Praegant Jacobo Pastor Jaime Camargo Jesús Legarrea Karnten Golf Open Lloyd Saltman Manuel Quirós Mark Haastrup Nacho Elvira Pablo Martín Peter O'Keeffey Roland Steiner Sebastián García Rodríguez Sebi García Xavi Puig
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