De la «mayor decepción» de su carrera al «mejor día de su vida». Inbee Park consiguió su particular redención tras la decepción causada por el 77 final con el que el año pasado cerró el Ricoh Women’s British Open. La surcoreana firmó un colosal 65 (-7) este domingo para alzar el séptimo major de su carrera y conseguir su particular Grand Slam, objetivo que se marcó hace dos años.
Con un -5 acumulado tras 54 hoyos, Park partía desde la quinta posición, obligada a remontar los tres golpes de ventaja que tenían la taiwanesa Teresa Lu y su compatriota y fan Jin Young Ko sobre ella. En los tres primeros hoyos del Ailsa Course de Turnberry hacía los deberes con dos birdies tempraneros, pero sus fallos en el 4 y el 5 le complicaban la consecución del único major del Grand Slam (antes de que el Evian Championship se considerase major) en su palmarés.
Más lejos parecía su entrada en los libros de historia como la séptima mujer que consigue los cuatro grandes cuando Ko, jugadora de 20 años que sorprendía por su desparpajo en su primer major, hacía eagle-birdie-par-birdie del 7 al 10. Park mientras iba a lo suyo, completando el mismo tramo con cuatro birdies consecutivos, consciente de que su infalible putt podría servirle para ir remontando poco a poco los tres golpes de desventaja que seguían separándole de la líder.
La clave del torneo estuvo entre los hoyos 13 y 16, donde Park aprovechaba para hacer un eagle y un birdie y Ko sucumbía con bogey y doble bogey al 16, yéndose al arroyo que custodia el green del par 4. Tres hoyos como líder en todo el torneo le sirvieron para alzarse con la victoria. Finalmente se impuso por tres golpes de ventaja, confirmando su recién recuperado número 1 del mundo.
Suyos son ya seis de los últimos catorce majors disputados en el calendario femenino. Con este British, se une a la prestigiosa lista formada por Pat Bradley, Juli Inkster, Annika Sorenstam, Louise Suggs, Karrie Webb y Mickey Wright como únicas jugadoras capaces de ganar los cuatro grandes.
“Esto es algo con lo que he soñado toda mi vida, toda mi carrera y todo este año. Alcanzarlo por fin es un alivio y ahora mismo estoy muy feliz. No me encontraba muy cómoda al comenzar la semana, pero es fenomenal haberme sobrepuesto a tantas cosas y ganar el campeonato», declaraba una eufórica Park.
A sus 27 años, sus números son cada vez más impresionantes. Ésta es su cuarta victoria de la temporada, llevando su total hasta dieciséis. Con su cheque de 450.000 dólares amplía sus ganancias en la élite femenina hasta los 12 millones, convirtiéndose así en la novena jugadora en la lista histórica.
El consuelo para Ko fue la segunda plaza en solitario. Sin perder la sonrisa en todo momento, completó con su 71 (-1) final una gran actuación en la que era su primera experiencia en un campo links y su debut en un major. So Yeon Ryu (68) y Lydia Ko (69), completaron el podio con sus acumulados de -8, a cuatro de Inbee Park.
Otra de las protagonistas del día fue la española Luna Sobrón, única amateur en pasar el corte que se despidió de Turnberry con su tercera vuelta por debajo del par. Con un 69 (-3) que le hizo acabar el torneo en -1 total en la decimotercera posición, conquistó el premio Smyth (una bonita bandeja) a la mejor aficionada, un galardón obtenido en años anteriores por jugadoras de la talla de Rebecca Hudson, Michelle Wie, Melissa Reid, Anna Nordqvist o Caroline Hedwall.
Azahara Muñoz acabó su participación en el torneo con una vuelta de 72 golpes, al par del campo, para un quincuagésimo puesto y un total de +9.
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