Zona Pro
Pinceladas del US Women’s Open (III)
Redacción | 22 de junio de 2014
Juli Inkster, una sorpresa con dos US Open (copyright USGA/Darren Carroll)
• Tachar de sorpresa a una doble campeona del US Women’s Open meramente por los casi 54 años que figuran en su documentación y las 35 ediciones del torneo que ha jugado es una temeridad, por mucho que el protagonismo lo hayan acaparado hasta ahora un puñado de «jovenzuelas» (Wie, Yang, Thompson, Lee e incluso la niña Lucy Li). Inkster declaraba esta misma semana que quizá este fuera su último US Women’s Open, decisión que tal vez se replantee en caso de éxito. De momento, su -4 de la tercera jornada la coloca a tiro de lograr el triunfo que a Tom Watson se le escapó hace no tanto en Turnberry.
• Inkster batiría sobradamente el récord de veteranía como triunfadora de un torneo del LPGA Tour (lo tiene Beth Daniel con 46 años y casi 9 meses en el Abierto de Canadá de 2003) y de un major (los 45 años, 7 meses y 11 días de Fay Crocker en el Titleholders Championship de 1960), todo un constraste con el récord de precocidad establecido por Lucy Li, que con sus once años es la jugadora más joven en clasificarse para el torneo a través de una previa.
• Stephanie Meadow está pasando relativamente desapercibida pero la actuación de la norirlandesa en su primer torneo profesional es espectacular… y eso que entró en el torneo casi a última hora dado que era una de las primeras suplentes. Meadow está a cuatro golpes del liderato y, si no llega a ser por un duro tramo final, habría optado a salir en el partido estelar. «Es imposible soñar con un comienzo mejor [para mi carrera profesional]», declaraba Meadow.
• Michelle Wie no quiere saber nada del refrán «no hay dos sin tres», ya que esta es la tercera vez que lidera un US Women’s Open después de 54 hoyos. Por su parte, Amy Yang, también estrella adolescente como ella que no ha terminado de cuajar como se esperaba, ya suma nueve top 10 en majors desde 2009 y cuenta con dos top 5 en el Abierto de EE. UU.
• La USGA sigue con su labor de orfebrería fina con el recorrido número 2 de Pinehurst. Durante la tercera jornada, el hoyo 10 volvió a ser el más fácil después de la carnicería del día anterior (que se mostró inexpugnable después de que le añadieran 120 yardas). Los «huesos» de la tercera ronda fueron el 16 (que no cedió ningún birdie), el 2 y el 11 (solo un birdie cada uno).
• Como el título fuera de su alcance salvo milagro, Azahara Muñoz aspira a superar su mejor resultado en un US Women’s Open, el decimonoveno puesto obtenido en 2010. Entre las españolas, la mejor noticia quizá sea la buena actuacion de Beatriz Recari, ya recuperada de sus problemas de espalda y de la posterior neumonía que sufrió, y la confirmación de que Belén Mozo ha dado ese esperado salto de calidad que la está llevando a disputar las jornadas decisivas en todos los últimos torneos.
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