«Oveja que bala pierde bocado» dice el bucólico refrán, y jugador que no hace birdies en el Nordea Masters se pierde en la clasificación, podríamos añadir después de asistir a un auténtico festival de buen juego ayudado, eso sí, por las perfectas condiciones en las que se presentaba un PGA Sweden National inofensivo sin la defensa del viento.
A esos dos motivos hay que achacar la orgía de birdies a la que hemos asistido en la tercera vuelta del Nordea Masters. La ausencia de viento en el campo, que no ofrece excesivas dificultades desde el tee, servía de metafórica alfombra roja para los mejores jugadores del European Tour y los golfistas aprovechaban la invitación, salvo contadas excepciones, para acribillar las banderas del recorrido sueco.
Solo así se explica que en una sola jornada los cuatro primeros clasificados hayan superado o igualado el resultado acumulado de los líderes después de las dos primeras vueltas (ayer, Quirós, Pepperell y Dubuisson mandaban con -6). Stenson (-8 en el día), Pepperell (-7), Gallacher (-7) y Quirós (-6) imponían un ritmo endiablado y parecían retroalimentarse con los aciertos ajenos en un sprint continuado a muchas bandas que hizo las delicias del público sueco.
En el tramo final, dos birdies finales para Stenson en los dos últimos hoyos (especialmente meritorio el logrado en el 17, un par 3 que dio mucha guerra) auparon al número 2 del mundo al liderato en el torneo que ejerce de abierto nacional de su país, posición en la que está acompañado por el aguerrido Pepperell, que en Girona se vino abajo el tercer día y en Suecia está sabiendo mantenerse.
Por su parte, Álvaro Quirós (-12), que está a un solo golpe de los líderes, empezaba de manera explosiva repitiendo eagle en el hoyo 1 y lo remataba en el 3, pero después llegaba un tramo de complicaciones y tiros menos precisos que el de Guadiaro solventó gracias a su acierto con el putter. Después, la máquina de birdies volvía a ponerse en marcha en la segunda mitad del recorrido y Quirós restaba otros tres golpes a la tarjeta (con cuatro birdies y un solo fallo en el difícil 17).
“Mañana quiero jugar igual de bien que hoy y con paciencia. Hoy, aunque he pegado algunos golpes mediocres, he conseguido meter algunos putts”, declaraba el español después de su vuelta.
También se deja alguna opción de título Rafa Cabrera-Bello, que con -5 en el día escalaba hasta la séptima plaza con -9 en el acumulado, aunque la cantidad de rivales que tiene que superar dificultará su empeño. El grancanario tendría que imponerse en el torneo para soñar con el US Open, ya que tendría que figurar en el top 60 del mundo el día 9 de junio.
Por detrás, Pablo Larrazábal es decimocuarto con -6; Nacho Elvira, vigésimo quinto con -4; Jorge Campillo y Eduardo de la Riva, trigésimo octavos con -2; y Miguel Ángel Jiménez, sexagésimo segundo con +1.
Deja un comentario