El golf, deporte de contrastes. Ayer todo se puso de cara en el Dubai World Championship para Álvaro Quirós, que acababa igualando el récord del campo con un 64 fruto de seis birdies y un eagle. Hoy, el de Guadiaro ha tardado exactamente un golpe en darse cuenta de que tocaba día de dura pugna. En el hoyo 1 cerraba su salida con la madera 3 y posteriormente tenía que dropar la bola, injugable en un arbusto.
Pero Quirós supo sufrir y no tardó en sobreponerse a cada revés, pese a que anduvo irregular desde el tee de salida (solo seis calles cogidas, con una madera 3 que hoy se ha mostrado poco dócil). Respondía al bogey del 1 con birdie en el 2; a los tres putts del hoyo 4 con un buen birdie en el 6 y un espectacular eagle en el 7, después de dar uno de los mejores golpes del torneo; al bogey en el 10 con birdie en el 11 y, luego, en el 15. El del 18, por motivos obvios, fue el único bogey que se quedó sin réplica, un tropiezo fraguado en un tercer golpe deficiente y un primer putt que se enganchó en el collarín. Al final, -2 en el día y -14 en el total.
Por detrás, su principal rival durante gran parte de la vuelta no terminaba de arrancar, pero Paul Lawrie acababa a lo grande (-5 en los seis últimos hoyos) para colocarse a solo dos golpes de Quirós, con un impacto de ventaja sobre el sudafricano Louis Oosthuizen y dos con respecto al resucitado Luke Donald, que quiere dejar zanjada la disputa por el número 1 en la lista de ganancias por la vía rápida. Y es que McIlroy, su némesis, estuvo vacilante durante los nueve primeros hoyos, aunque reaccionó con pundonor en los nueve sigueintes y acabó bajo par, pero con -8 y a seis golpes de Quirós (recordemos que al norirlandés solo le vale la victoria).
A Sergio García también le tocó batallar con el Earth Course y sacó un gran -4, sobre todo si tenemos en cuenta que cogió solo 9 greenes. Su magia con el juego corto y el putt le ha permitido colocarse octavo con -8, algo lejos pero a la expectativa, mientras que con un golpe más está el barcelonés Pablo Larrazábal, batallador hasta el final y con tres birdies y un bogey en los cuatro últimos hoyos.
Gonzalo Fernández-Castaño se complica la permanencia en el top 50 mundial con su vuelta de par (vigésimo segundo), mientras que Rafa Cabrera-Bello ha descendido a la trigésimo octava plaza (se aleja el top 30 de la Race to Dubai, que le permitiría entrar en el Open Championship) y Miguel Ángel Jiménez ha echado mano de su garra en un campo que no traga para acabar con -1 en el día y cuadragésimo noveno en la general.
Mañana, culminación de la temporada 2011 del European Tour con Álvaro Quirós en el partido estelar, como la semana pasada en Hong Kong, y Sergio García al acecho, magnífico colofón de una temporada exitosa para los españoles.
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