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Rory McIlroy ya manda en Dubái

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Redacción | 30 de enero de 2015

Rory McIlroy durante su segunda ronda en Dubái (Foto:ET/Getty Images)

Rory McIlroy puede salir a jugar de verde fosforito o de rosa pálido como hoy, que lo que de verdad llama la atención es el juego que es capaz de desplegar en dieciocho hoyos, ese que este viernes le ha valido para colocarse líder en el Omega Dubai Desert Classic.

Si el jueves se dejaba algún error por el camino hoy han sido todo aciertos, ocho birdies con una racha final de tres seguidos para un agregado de menos catorce que le deja con uno de ventaja sobre Marc Warren. Rory ha decidido que para qué esperar, que si tenía el día bueno y le daba por coger diecisiete greens, pues ya se ponía líder y a ver quién le aguanta el ritmo los dos días que quedan. Aquí no valen medias tintas. Si a alguien le queda la duda de que va a ser el dominador del golf mundial en los próximos años, solo tiene que ver sus últimos resultados. En el European Tour, desde su triunfo en el Open Championship, solo ha ganado o quedado segundo en los otros cinco torneos jugados, y en el PGA Tour únicamente salió una vez del top 10 para quedar vigésimo segundo en The Barclays. En un torneo como este, con tantas opciones de birdies por el camino, cualquier cosa puede pasar pero de momento en lo más alto de la clasificación ya está el número uno del mundo.

A un impacto, como hemos señalado, está Marc Warren al que un par de errores le han empañado una vuelta que estaba siendo espectacular y que ha finalizado con 65 (-7) golpes. Tras Warren, terceros a dos golpes de la cabeza con menos doce, están Seve Benson, solo con la mácula de un severo doble bogey en su noveno hoyo (el 18 del campo), y Graeme McDowell, que ha firmado una sensacional vuelta de 65 (-7) en la que solo ha dado 24 golpes en los greens. Atentos al norirlandés, que cuando carbura siempre termina arriba.

Con menos once está el grupo perseguidor, con Lee Westwood y Stephen Gallacher acompañando a algunos de los protagonistas de este inicio de año como Danny Willett, Andy Sullivan o Bernd Wiesberger, que salía como líder esta segunda ronda, pero que no ha sabido cerrar las oportunidades que ha tenido dejando su tarjeta en menos tres. Aún con todo, el austriaco todavía no ha hecho un bogey en 36 hoyos y como le empiecen a entrar los putts puede saltar la banca.

El mejor de los españoles es Pablo Larrazábal que ha tenido un momento mágico desde el 18 al 4 (salía por el 10) donde se ha ido con cinco birdies consecutivos. Esas ráfagas de Pablo que están al alcance de tan pocos. Menos seis final para subir al decimocuarto puesto a cinco golpes de Rory. Le sigue Jordi García Pinto que ha sellado un tramo final con cinco birdies en los últimos nueve hoyos que le permite auparse hasta la decimoctava posición con un agregado de menos ocho.

Cuatro puestos más abajo está Jorge Campillo que ha firmado un 70 (-2), mientras que el menos tres de Alejandro Cañizares le vale para llegar hasta la quincuagésimo segunda posición. Seis puestos más abajo se encuentra Álvaro Quirós, el último de los nuestros que ha conseguido pasar el corte.

No jugarán el fin de semana Rafa Cabrera-Bello, fuera por un golpe, José María Olazábal, Javier Ballesteros, que ha terminado con un acumulado de más veinte, y Sergio García, que a pesar de realizar un eagle con un putt kilométrico en el 13 y otros dos birdies, otro mal comienzo con tres errores le ha impedido seguir adelante en Dubái.

Resultados de la segunda ronda del Omega Dubai Desert Classic