A veces solo hace falta mantener una idea a lo largo de 18 hoyos para desarrollar un gran golf. Puede ser una sensación en el swing, un recuerdo o, como le ha sucedido a Sandra Gal en la primera jornada del CME Group Titleholders, la certeza de que la temporada está llegando a su fin, y que más le valía dejarse de miramientos. “Pensé que este torneo era algo diferente al resto, por lo que quise ser muy agresiva y salir a por todas porque lo único que quieres hacer aquí es ganar”, declaró. “Cualquier otra posición no importa demasiado”. En sus seis primeros hoyos invocó una tormenta en el Tiburón Golf Club, que llegó en forma de seis birdies consecutivos. Adiós a las dudas. No había nada que perder.
Solo un bogey en su tarjeta y tres aciertos más por los nueve segundos le valieron para firmar una tarjeta de 64 impactos (menos ocho), la mejor del día. “Me ayudó mucho mantener esa mentalidad”, continuó. “Metí un putt tras otro y, con ese comienzo, fue muy divertido”. Ajena a presiones tales como mantener la tarjeta, luchar por su primera victoria desde 2011 o el tener en el mismo campo a las mejores jugadoras del mundo, Sandra derrochó convicción para llegar al liderato; aunque no fue la única que se dio un festín de birdies en este recorrido de Naples (Florida).
Rebecca Lee-Bentham fue capaz de quedarse a un solo impacto de la alemana gracias a ocho birdies a lo largo de su ronda, construidos gracias a una gran consistencia en su juego largo (dieciséis greenes en regulación). Una vuelta apacible para la canadiense, que experimentó aquella felicidad de la que hablaba Greg Norman como “un largo paseo con el putter”. Anna Nordqvist, que cogió todas las calles, se quedó en el menos seis, empatada en tercera posición con Shanshan Feng y una Lexi Thompson intratable. “Parece mucho más tranquila”, declaró Curtis, el hermano mayor de la estadounidense y su caddie esta semana. “Está mucho más relajada encima de la bola. Creo que puede ser la diferencia en su juego largo y su putt últimamente”. Y puede que vuelva a serlo esta semana, ya que tras ganar su segundo torneo del año hace unos días, Lexi no entiende de riesgos o errores. Sus seis birdies la sitúan como una de las jugadoras más en forma del momento.
Inbee Park, con una vuelta de menos cuatro, es la mejor situada de las llamadas Grandes del LPGA Tour, con tres golpes de ventaja sobre Stacy Lewis (menos uno) y Suzann Pettersen (par). El Vare Trophy, que se otorgará a la que menor media de golpes haya llevado a lo largo de la temporada, sigue a buen recaudo para Stacy, que lleva ya dieciséis rondas al par o mejor. Caroline Masson, que busca defender su posición en la carrera por ser nombrada Rookie del Año con un dedo fracturado, comenzó con una vuelta de más cinco, mientras que su principal perseguidora, Morirya Jutanugarm, entregó un menos dos.
Tres vueltas al par entregaron las españolas (Azahara Muñoz, Carlota Ciganda y Beatriz Recari) en esta primera jornada, que jugaron juntas. Las sitúa cuadragésimas pero, por suerte para ellas, esta semana no se hará un corte en el torneo.
Deja un comentario