Es el único torneo sudafricano que no tiene en sus vitrinas y el que ha rondado en más ocasiones, con cinco top 5 sus doce participaciones. Se disputa en Johannesburgo, su ciudad de origen, y Charl Schwartzel (-13) ya ha declarado que ganar este Open de Sudáfrica sería como hacerse con su segundo major. Pero el anhelo, lejos de interferir, ha ido de la mano del acierto y el favorito local saldrá a la jornada decisiva con cinco golpes de margen sobre el inglés Matthew Fitzpatrick y el escocés David Drysdale.
Schwartzel no dejó opción a la sorpresa y empezó encadenando cuatro birdies consecutivos para adquirir una ventaja considerable y coger una inercia positiva que le llevaría a firmar un gran 66 (-6), segunda mejor vuelta del día después del 65 con el que el inglés Lee Slattery ascendía hasta la cuarta plaza. Pese al margen favorable, Schwartzel anda prevenido porque el año pasado ya salió líder a los últimos 18 hoyos y terminó cuarto con un 71 final en el Glendower Golf Club.
«He pegado golpes muy buenos pero ha habido de todo, con golpes magníficos y buenas reacciones para salvar el par, y también con algunos golpes malos en los que quizá haya tenido buena suerte», resumía el astro local.
Por detrás, el principal rival parece el joven Matthew Fitzpatrick, que disputa su primera temporada completa en el European Tour y que tiene a tiro su primera victoria con apenas 20 años.
Entre los españoles el más destacado sigue siendo el malagueño Pablo Martín, quinto con -6 (lejos de Schwartzel pero a solo dos golpes de la segunda plaza) que tuvo una jornada movida y que acababa de manera agridulce.
«Cualquier vuelta bajo par en este campo es una buena vuelta. Una pena acabar con dos bogeys en los hoyos 16 y 17 pero estoy contento con como va el torneo. Aunque Charl Schwartzel ha hecho una buena vuelta, mi objetivo no es estar ahí para ganar sino hacer cuatro vueltas sólidas y acabar con un torneo decente», declaraba el español, que finalizaba con -1 (71) en el día.
Después de su retiro provisional y de una vuelta a la actividad progresiva, Martín dice encontrarse en un gran momento de juego, controlando todos sus aspectos, un síntoma magnífico en estos primeros compases de una temporada en la que tendrá que luchar por un hueco en el circuito.
«Lo estoy pasando muy bien en el campo de golf porque creo que ahora tengo las cosas más o menos controladas. He hecho el trabajo fuera del campo de golf y vengo muy tranquilo sabiendo que están todas las cosas en su sitio y que solo tengo que salir ahí a disfrutar», terminaba Martín.
Por detrás, Carlos del Moral y Jorge Campillo ascendían a la vigésima plaza tras entregar sendos 69, Pedro Oriol también bajaba del par y es trigésimo sexto, y Nacho Elvira cedía terreno y finalizaba cuadragésimo cuarto con +3.
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