Zona Pro
Sergio no puede con Horschel, que se lleva el BMW Championship
Redacción | 08 de septiembre de 2014
A falta de dos hoyos en el BMW Championship, Sergio García, tras una jornada excelente en la que acumulaba un -6 en la tarjeta e iba camino de firmar la mejor vuelta del día, andaba a dos golpes de un Billy Horschel que había estado contemporizando e intentando minimizar errores, dando toda su confianza a un putter que le estaba funcionando realmente bien, pero que no terminaba de despegar. El estadounidense jugaba el último tramo más agarrotado, celebrando el par del 16 como si de un birdie se tratara y mostrando indicios de que la presión pasaba factura. Con esto se plantaba Sergio en el par 5 del 17, con opciones reales de poner a Horschel en una situación de tensión máxima y buscarle las cosquillas, pero el destino tenía otros planes.
Tras el primer golpe desde el tee con la madera 3, una salida que salió con mucha altura y se quedó algo corta, resultó un tanto sorprendente la elección de Sergio desde la calle. A 230 metros de bandera, aunque estuviera protegida por agua, jugándote el triunfo o entrar al playoff parecería normal ir a por el green y buscar el eagle. Lo mismo que sus compañeros de partida, Rickie Fowler y Bubba Watson hicieron con éxito, aunque desde mejores posiciones. Sin embargo, Sergio jugó a calle, a dejarse un approach de algo más de 70 metros. Algo no le convencía; quizá la posición de la bola, o el cercano recuerdo de lo ocurrido durante la segunda jornada, cuando se fue al agua aunque terminó salvando el par.
La solución parecía interesante y comprensible si no andas con la confianza para ir a por el green y, sobre todo, porque Sergio domina los tiros a green cortos. La cosa pintaba a intento de eagle desde ahí y si no se conseguía, putt para birdie e intentar rematar en el 18. La realidad fue otra: se pasó de green y el chip posterior buscando bandera se fue al agua, saliendo al final del hoyo con triple bogey y fuera de la lucha por el torneo tras tripatear de nuevo el el green.
Durante gran parte de su carrera, a Sergio se le ha reprochado la falta de instinto asesino para rematar los torneos, para cerrar en la última vuelta el trabajo de toda la semana sobre todo en grandes escenarios; de hecho, el mismo se descartaba hace unos años parar ganar majors tras una jornada desastrosa en Augusta. Sin embargo, en esta temporada en la que ha estado a punto de ganar en tres ocasiones y ha quedado entre los cuatro primeros otras cuatro veces, incluido el torneo de esta semana, Sergio no puede reprocharse nada ya que en casi todos ellos se ha encontrado con alguien mejor que él y solo esta semana, tras la tercera ronda en la que pasó un infierno en los greenes todavía por entender y con su desastre en el 17 del último día, podríamos decir que la cosa ha tenido más que ver con él que con circunstancias ajenas. En cualquier caso, y aunque el cuarto puesto de Sergio tras su 67 (-3) de hoy deja un sabor agridulce, toca recuperar el ánimo y el juego para afrontar el final de temporada con el TOUR Championship en condiciones de ganar.
El que va a tope de moral es Horschel, que tras el segundo puesto en el Deutsche Bank de la semana pasada, con error en el 18 incluido que le costó el triunfo, ha aprendido la lección y se ha redimido con una victoria que le vale además el segundo puesto en el ranking de la FedEx Cup, con lo que tendrá en sus manos el poder llevarse el cheque de diez millones de dólares la semana que viene. El estadounidense andaba con la mosca detrás de la oreja tras ver como su inmediato perseguidor, Ryan Palmer, empataba el torneo al paso por el 11 y como Sergio se acercaba peligrosamente tras nueve hoyos de ensueño. Parecía que Horschel tendría que dar un golpe en la mesa y subir el nivel pero, para su sorpresa, fueron los otros dos los que decidieron que no querían ganar el BMW y tras nueve pares consecutivos, Horschell se iba a casa club con 69 golpes (-1) y su segunda victoria en el circuito.
Después de las exhibiciones de Kirk y Horschel durante estas semanas de playoffs, unidas a la retirada de Bradley y la mediocre actuación de Simpson, nos preguntamos si no estará Tom Watson pegado al teléfono como loco señalando que no, que había escrito Horschel y Kirk, que ha debido de haber un error, que por favor lo subsanen o que amplíen el plazo.
Por otro lado, segundo en solitario a dos golpes ha terminado Bubba Watson que ha realizado tres 66 seguidos y que se va al TOUR Championship en plena forma y como uno de los favoritos. Por cierto, Rory McIlroy quedó octavo tras volver a necesitar cuatro putts en el 12 para terminar el hoyo. Vidas paralelas con Sergio, ya que una mala tercera ronda y un mal hoyo el último día le han sacado del torneo, pero de Rory nadie duda. Paradojas.
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