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Stacy Lewis se queja del público chino
Enrique Soto | 07 de octubre de 2013
La número tres del mundo solo cometió un bogey a lo largo de los 72 hoyos del Reignwood LPGA Classic. Fue un despliegue espectacular que bien podría haber merecido su cuarta victoria de la temporada (entre las que se encuentra su segundo grande, el Women’s British Open), pero una jugadora le impidió conseguirla. Se trataba de Shanshan Feng, la ídolo local que hizo enloquecer a todo un país, de la que es su principal embajadora para el golf.
Stacy Lewis tenía un golpe de ventaja sobre Feng en la salida del tee del 18, par 5. Jugó el hoyo de forma inteligente y precisa: tres impactos hasta el green y un putt de seis metros para birdie le dejaban con todas las opciones de triunfar. Sin embargo, poco antes, Shanshan afrontó su segundo golpe por encima del agua y directa a bandera. En este vídeo que os adjuntamos podéis ver lo que sucedió.
“Siento que me han quitado el título”, declaró Lewis al finalizar. “Te gustaría ganar después de un buen golpe pero, obviamente, este no fue uno de esos. Es muy frustrante. Fue, en general, un día frustrante con el público y teniendo que lidiar con esto. Era difícil jugar hoy aquí”.
Poco después, Stacy se despachó a gusto también en su cuenta de Twitter. Esto es lo que escribió:
“Felicidades a Shanshan por la victoria. Increíble el golpe del 18. Muy decepcionado con los fans de China esta semana”.
“Entre las cámaras y los gritos cuando fallaba putts… Era muy difícil disfrutar ahí fuera”.
“Y por cierto, antes de que veáis ese golpe en el 18 para ganar… Digamos que incluye a una roca y al palo de la bandera”.
No tardó mucho en anunciar, tras estos comentarios, que cerraría su cuenta de Twitter:
“Para aquellos que eran verdaderamente un apoyo en Twitter, siento decir que lo dejo. Siento haber dicho lo que pensaba”.
Y no sería de extrañar que Lewis hubiera recibido alguna llamada tras sus comentarios. El golf en China es un mercado con mucho futuro y son muchos los interesados en hacer caja allí. Como pasa en otros países sin mucha tradición, es normal que el público se salga algo de tono en ciertos momentos.
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