«Quien gana, repite», parecía ser la máxima que podría definir el desenlace del KLM Open. En la casa club del Kennemer Golf & Country Club, Thomas Pieters con -19, esperando convertirse en campeón por segunda vez en tres semanas. En el campo, Lee Slattery, vencedor la semana pasada en el M2M Russian Open.
Y cuando parecía que ambos iban a luchar por el título en el desempate, Lee Slattery cometió tres putts en el último green y entregaba el título a un Pieters que confirma su status de estrella emergente del golf europeo.
El belga partía a dos golpes de los colíderes, Slattery y un Rafa Cabrera-Bello que una vez más no encontró su ritmo en una jornada final y volvía a difuminarse en los momentos decisivos. Pieters firmaba cuatro birdies en los nueve primeros hoyos y el relevo español lo daba Eduardo de la Riva, que escalaba en la clasificación gracias a un buen comienzo y a un espectacular remate con 29 golpes en la segunda mitad del recorrido.
Al final, Pieters superaba por un golpe a De la Riva y solo quedaba ver si Slattery sería capaz de igualar o rebasar al belga, pero su error en el último hoyo lo dejó con la miel en los labios y empatado con De la Riva en la segunda plaza.
«Estoy contentísimo. Creo que jugué mejor en la República Checa, pero mi juego corto ha estado fenomenal esta semana y me ha salvado muchas veces», resumía Pieters. «Es muy especial ganar aquí, tan cerca de casa. Ha sido genial escuchar a los fans holandeses corear mi nombre y respaldarme, así que les doy las gracias».
Por su parte, Eduardo dela Riva finalizaba con la segunda mejor vuelta del día para finalizar segundo y asegurarse la tarjeta del European Tour para el año que viene, un alivio que le permitirá mirar hacia arriba y luchar ahora por entrar en la gran final de Dubái, reservada a los 60 mejores del circuito.
«He tenido un día muy bueno. Toda la semana he jugado muy bien de tee a green, embocando muy buenos putts todos los días. No me pasaba desde hacía mucho tiempo; siempre algún día me fallaba el putt o me fallaba el juego. En este torneo, por suerte, he conseguido poner cuatro vueltas muy buenas», explicaba el barcelonés.
Por detrás, Rafa Cabrera-Bello terminaba séptimo, Alejandro Cañizares escalaba hasta la duodécima plaza después de un magnífico día (65, -5) y Álvaro Quirós terminaba en la sexagésimo sexta plaza.
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