Día complicado en la oficina el que vivió ayer tanto Tiger Woods como el resto de jugadores presentes en el Northwestern Mutual World Challenge. El anfitrión del torneo firmó 10 golpes más que en la jornada anterior (62-72) con una tarjeta que incluyó cuatro bogeys compensados con otros tantos aciertos, dos de ellos llegados en los tres últimos hoyos. Precisamente gracias a esa reacción final, lidera el torneo con -11 total, dos golpes de ventaja respecto a Zach Johnson.
La media de golpes en la que se jugó ayer el campo de Sherwood Country Club fue de 73, teniendo todos los jugadores algún momento complicado con el que lidiar durante la jornada de movimiento. Los fallos de Tiger más notables fueron un golpe de salida al agua y tres putts desde 2 metros y fue precisamente su comportamiento en los greenes donde se mostró más vulnerable. «Estoy encantado de liderar, pero no de cómo he pateado hoy. Me he dejado unas cuantas oportunidades por el camino».
No es para menos su alegría por el hecho de llegar desde la posición dominante a la última jornada del torneo. De las 53 veces que ha llegado al domingo en esta situación, ha acabado llevándose la victoria en 48 ocasiones. Este año, de sus cinco triunfos, cuatro han llegado liderando al comienzo de la última jornada. ¿La última vez que no ocurrió? En este campo, en este torneo. En la remontada de Graeme McDowell en 2010.
Sin embargo, vistas las condiciones de Sherwood, puede que dos golpes sean una ventaja fácil y rápida de remontar. Sirva como ejemplo para ilustrar tal afirmación los cuádruples bogeys que firmaron Keegan Bradley y Steve Stricker en el hoyo 15, par 3 en el que 11 de los 18 jugadores se fueron al agua y que se jugó a una media de golpes de 4.17. Zach Johnson fue de los que contribuyó a ampliar esa media con un doble bogey en este hoyo, donde llegó en su mejor momento, a un golpe del líder Tiger Woods.
Solo tres jugadores fueron capaces de jugar bajo par el día de ayer. Bubba Watson (69 golpes, -3) fue uno de ellos. Llegó también a estar a un golpe del liderato antes de firmar un tripateo en el 18 y de que Tiger hiciera sus últimos dos aciertos. «Este campo es muy difícil. Ahora mismo está liderando un buen jugador, que ya ha ganado aquí anteriormente y que se conoce muy bien este campo». A cuatro golpes de Tiger a falta de una jornada, Watson promete pelea. «He jugado bajo par las últimas tres vueltas y quiero seguir haciéndolo. Si puedo bajar de 70 golpes, me daré una opción.»
Rory McIlroy firmó la mejor vuelta del día con un 68 (-4) con el que maquilla su flojo comienzo en el torneo (73-77).
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